Beneficios para mamá y el bebé

Beneficios físicos e inmunológicos para el bebé.

La leche materna, proporciona toda la energía y los nutrientes que necesitan los bebés durante sus primeros meses de vida y sigue supliendo al menos la mitad de sus necesidades nutricionales después de los seis meses y hasta un tercio de su segundo año de vida.

La leche materna ayuda a desarrollar las capacidades de lenguaje, de inteligencia y de conocimiento, además de proteger al bebé de enfermedades infecciosas y crónicas. La lactancia materna como alimento exclusivo reduce la mortalidad infantil por padecimientos como la diarrea o la neumonía y en caso de enfermarse, favorece que se recupere más rápido.

Otro beneficio es que la lactancia materna ayuda a la madre y a su bebé a tener una relación afectiva íntima, la cual hace que las madres se sientan muy satisfechas emocionalmente. El contacto estrecho inmediatamente después del parto ayuda a que esta relación se desarrolle. Este proceso se llama vínculo afectivo.

Los bebés lloran menos cuando se quedan cerca de sus madres y son amamantados inmediatamente después de nacer. Las madres que amamantan reaccionan ante las necesidades y mensajes de sus bebés de una manera más afectuosa.

De acuerdo a algunos estudios es posible que la lactancia ayude a un mejor desarrollo intelectual. Bebés con bajo peso al nacer que son alimentados con leche materna durante las primeras semanas de vida, obtienen puntajes más altos en exámenes de inteligencia, hechos unos años más tarde, que aquellos bebés de características parecidas alimentados artificialmente.

Beneficios físicos e inmunológicos para la madre.

Inmediatamente después del parto, la succión repetida del bebé provoca que el organismo de la madre libere una sustancia que además de dar la señal al seno para que la leche fluya hacia el bebé, también produce contracciones en el útero para prevenir la hemorragia post-parto y ayuda a que el útero se recupere y regrese al estado de no embarazo.

Mientras más constantemente la madre amamante, tardará más el regreso de sus períodos menstruales. Esto tiene el gran beneficio de conservar el hierro en el organismo de la madre. La cantidad de hierro que su cuerpo necesita para producir leche es menor que la que pierde con el sangrado menstrual. Así que tiene menos probabilidades de anemia provocada por insuficiencia de hierro.

Además, la lactancia materna se asocia con un menor riesgo de sufrir cáncer de mama o de ovarios y de diabetes en la mujer.

Beneficios psicológicos tanto para la madre como para el bebé.

La lactancia genera un vínculo afectivo entre la mamá y el bebé. Un bebé amamantado pasa muchas horas entre los brazos de su madre, ahí, sus sentidos aún en desarrollo tienen oportunidad de tener contacto piel a piel. Cuando una madre amamanta, reafirma en el bebé su existencia a través de la mirada y el contacto materno.

La lactancia también provoca la liberación de unas sustancias en el cuerpo de la madre que ayudan a producir sentimientos maternales y agudizar su intuición.